“Girl and Death” de Edvard Munch. 1895 Y cuando me preguntaron ; ¿De qué conocía a La Vida? Contesté que era versátil y porfiada, de vez en cuando la había visto morderse el labio y peinarse a contrapelo, siempre con su sonrisa cautivadora , quizás sea vil y pérfida, pero hablando mal de ella, es cuando más seductora resulta. Varo
"Hic Svnt Dracones"